Este domingo 11 de abril, más de 25 millones de peruanos están convocados a emitir su voto para elegir al nuevo presidente y sus dos vicepresidentes, junto a los nuevos 130 representantes del Congreso y 5 del Parlamento Andino. Si hay algo seguro en esta próxima jornada es que ninguno de los candidatos presidenciales aglutina el 50 % de los votos válidos, por tanto, se necesitará una segunda vuelta para definir quién será el nuevo presidente peruano.
De lo que hay total incertidumbre es quién será la persona que ocupe la Casa de Pizarro durante los 5 años venideros. En medio de la segunda ola de la pandemia por COVID-19 en el país, alcanzando los 1.5 millones de casos registrados y rompiendo el récord de muertes diarias esta semana, en el electorado peruano existe gran cantidad de indecisos (cerca del 30%) y los últimos sondeos muestran un quíntuple empate técnico.
Las dos últimas encuestas internas de Ipsos y Datum, que no pueden ser publicadas abiertamente en Perú debido a norma electoral, han circulado en redes y comentadas en medios extranjeros, mostrando la constante poca diferencia entre los primeros lugares junto con algunas subidas inesperadas.
En el estudio de Ipsos, el primer lugar es atribuido a Keiko Fujimpri con el 12.9% de los votos válidos, siguiendo Pedro Castillo (12.7%) de Perú Libre, Yonhy Lescano (12.1%), Hernando de Soto (11.4%), Verónika Mendoza (10.6%) y Rafael López Aliaga junto a George Forsyth igualados en sexta posición (8.7%). Datum también posiciona primero a Fujimori, ocupando los siguientes puestos Lescano (12.8%), López Aliaga (12.4%), Castillo (11.4%), De Soto (10.1%), Mendoza (8.3%) y Forsyth (7.7%).
Resalta en los sondeos el nuevo ocupante del primer lugar, Keiko Fujimori, así como la inusitada fuerza con la que el candidato de izquierda extrema, Pedro Castillo, se ha posicionado en las encuestas, alcanzando la posibilidad de pasar a la segunda vuelta. De esta forma, cualquiera de estos 7 candidatos podría llegar a sentarse el sillón presidencial, en unas elecciones con un ambiente polarizado y la catástrofe de la pandemia.